CALIFICA ESTA ENTRADA:
En Sudamérica la estrategia de Roma es: Reducir la espiritualidad de la iglesia, acercarla imperceptiblemente lo más posible al sistema romano, y prepararla para la aceptación de la ley dominical, habiendo anulado el mensaje del tercer ángel y buena parte de la herencia profética adventista en la mente de la hermandad.
En primer lugar, con el paso de los
años se ha ido creando una estructura rígida y autoritaria, desplazando en la
mente de la hermandad la lealtad a Dios, y colocando en su lugar la lealtad a
la estructura de la Iglesia,
a sus autoridades humanas, de acuerdo al modelo católico romano. En Sudamérica esto
ha sido relativamente fácil de lograr, debido a la mentalidad tradicionalmente
católica de los pueblos, que se ve reflejada en la hermandad. Pocos en
Sudamérica reconocen que el sistema bíblico de gobierno eclesiástico es bien
diferente del católico jerárquico; solamente aquellos que leen mucho al
Espíritu de Profecía y así adquieren una forma de pensar diferente que la
tradicional sudamericana, acostumbrada a las dictaduras.
Se ha impuesto la idea de que las
Juntas son dirigidas por Dios, y que sus decisiones deben ser respetadas, no
importa que vayan en contra de claros principios bíblicos. Los presidentes de
las Asociaciones, cual papas romanos, se envanecen diciéndoles a la hermandad
que, si ellos estuviesen haciendo las cosas mal, entonces Dios los quitaría de
su lugar, ya que sólo a Él le corresponde el juzgarlo. Así obligan a la
hermandad a permanecer pasiva e impotente, mientras ellos realizan toda clase
de injusticias, arbitrariedades y
deshonestidades.
Las elecciones de las autoridades eclesiásticas de alto rango,
como los presidentes de Asociaciones, se realizan de la manera más escandalosa,
manipulándose los delegados y las Juntas, de tal manera que algunos saben de antemano quiénes serán
los nuevos elegidos, ya que todo fue “cocinado” de antemano por los que
realmente tienen los resortes del poder. Las oraciones pidiendo la dirección
del Espíritu Santo en las Comisiones electivas son un insulto a Dios, porque en
su mente cada uno sabe lo que tiene que decir y lo que tiene que callar, de lo contrario
perderá su puesto. Cada uno de ellos son como actores de una pieza de teatro.
Una vez creada la estructura jerárquica
al estilo católico, el resto es relativamente fácil, porque se colocará a cada
persona en el lugar que se desee, para realizar la tarea encomendada, y a la
vez se quitará a quien moleste con relativa facilidad, de manera que todos se
sientan amenazados e inseguros, y se vean forzados a vender sus principios y
callar cualquier cosa abominable que vean, para poder permanecer en su puesto,
que en muchos casos representa su única posibilidad de ingresos económicos. Así
la corrupción en las instituciones adventistas ha llegado a un punto muy grave,
que ha escandalizado aún hasta a los mundanos.
0 comentarios :
Publicar un comentario